Hoy se cumple un año desde que se produjo el gran ataque militar a Ucrania por parte de Rusia. El comienzo de una guerra que está dejando miles de muertos y millones de personas desplazadas. Desde el comienzo, la Fundación Juan Perán – Pikolinos se puso a trabajar para brindar ayuda en el conflicto. Gracias al apoyo del Grupo Pikolinos y coordinados con la agente comercial en el país, Elena Filipetska, conseguimos mandar 5 envíos de ayuda humanitaria (tres de ellos directamente con la furgoneta de la Fundación), entregamos 1.709 pares de zapatos e hicimos una aportación a ACNUR para ayudar a las personas refugiadas.
Pero la necesidad continua y a principios de año, Elena que viaja frecuentemente al país, nos contó la necesidad de muchas familias que vivían en la zona de conflicto y que tras la llegada del invierno y los frecuentes cortes de luz tenían que soportar temperaturas bajo cero. Así que no lo pensamos y enviamos tres generadores para la zona. Que llegasen hasta allí no ha sido fácil porque la nieve y la guerra dificultaban el transporte. Pero estos tres generadores ya están en la ciudad de Orekhov, en la región de Zaporozhye, un lugar que se encuentra totalmente devastado pero que todavía hay muchas familias que viven allí porque tienen la ilusión de volver a recuperar su vida.
Mientras, estamos muy atentos a todo lo que acontece, Elena nos va informando como se vive allí. Nos dice que las alarmas suenan varias veces al día, teniendo que ir rápido a los sótanos de las casas para evitar los bombardeos. La ciudad de Kiev, que es donde vive Elena, está cortada y solo puedes acceder a través de varios puntos bajo estrictos controles militares. Pero dentro de la ciudad todo continua, son muchas las personas desplazadas que han huido del país, otros que ya han vuelto y otros tantos que no se han ido porque tienen la confianza de que todo pase pronto. Ella ha decidido seguir trabajando, y vender zapatos Pikolinos, por eso ha abierto dos tiendas para dar trabajo a la gente de allí y así también tener algo de normalidad ante tanta catástrofe. Elena está segura que pronto esto acabará y nosotros queremos tener su misma esperanza. Pero ahora mismo solo sabemos que siempre estaremos ahí cuando nos necesite.
#AyudarEsVida.
